miércoles, 11 de enero de 2012

SPODDING

Un  elemento imprescindible del equipo para todo carpista son los “rockets” o cohetes cebadores. Con este artilugio seremos capaces de cebar nuestro puesto a grandes distancias y con bastante precisión. Es un método de cebado que requiere técnica  en el lanzado y sobre todo mucha práctica para ir mejorando en distancia y en precisión. Personalmente, considero que es imprescindible conocer su técnica y sus elementos para desenvolverse en la mayoría de situaciones que se nos pueden presentar.
COHETES:
En el mercado disponemos de cohetes de muchos tipos, vamos a hacer un breve resumen:
Los cohetes específicos para el cebado de boilies y pellets  tienen una forma muy alargada, estrecha y sin perforaciones, esto nos permite llenarlo con un poco de agua para aumentar su peso y poder lanzarlo a grandes distancias. El inconveniente es que su recogida se hace un poco complicada cuando se nos llena de agua.
Los cohetes específicos para semillas y todo tipo de mezclas o “spod mixes” son los más populares y los más conocidos por todos. Los hay en distintos tamaños en función de la cantidad de cebo que queramos introducir y de la rapidez del proceso. Los modelos “mini” son ideales para meter el cebo con delicadeza y precisión para no asustar a las carpas cuando están en la zona. Los más grandes nos permiten meter mucha cantidad de cebo en muy poco tiempo, como inconveniente tenemos que su elevado tamaño nos priva de poder alcanzar grandes distancias si la situación lo requiere. Todo este tipo de cohetes para semillas están perforados totalmente para facilitar la evacuación del agua durante la recogida.
Por último tenemos los cohetes específicos para las mezclas semilíquidas que usamos con la pesca a medias aguas. Este tipo de cohetes son parcialmente cerrados, sin apenas orificios,  para poder introducir la mezcla sin derrames. La parte superior del cohete está ligeramente perforada para facilitar la recogida. Su utilización va enfocada a introducir mezclas semilíquidas, gusanos, etc  que hagan nube en nuestro “spot” y  crear una fuente de atracción para los peces en toda la columna de agua.

PUENTES:
Otro elemento imprescindible para el empleo de esta técnica de cebado es la utilización de puentes de trenzado, terminales de choque de alta resistencia o ”Shockleaders”  para evitar roturas en el lanzamiento del cohete. La utilización de las líneas trenzadas es imprescindible ya que éstas no sólo dan una mayor resistencia a la rotura en el crítico momento del lance sino que no tienen elasticidad. Este hecho supone que la compresión de la caña durante el lanzado sea mayor en comparación con un monofilamento y por lo tanto el lanzamiento será más lejano. Yo suelo introducir 2 veces la longitud de la caña (unos 8 metros) de mi “shockleader” de unas 50lbs de resistencia en el carrete de tal modo que en el momento de lanzar tenga 3 o 4 vueltas de puente en la bobina para garantizar un lanzado más “seguro”. El nudo que utilizo para unir la línea principal con el puente es el “doble grinner knot”.

SEGURIDAD:
En referencia a la seguridad, debemos protegernos nuestro dedo con dediles para evitar cortes profundos por culpa del trenzado durante el lance. En el mercado disponemos de unos guantes especialmente diseñados para el trabajo con el cohete que protege el dedo índice y deja al descubierto el resto de dedos. Además dispone de un material que mejora el agarre con el contacto de nuestra caña. Sin embargo, los más utilizados son los dediles que usan los pescadores de la modalidad de surfcasting con los que consiguen alcanzar grandes distancias en el lance.
LÍNEAS:
En cuanto a la línea a utilizar, es conveniente que también sea trenzada ya que podemos utilizar diámetros muy bajos con el objetivo de ganar más distancia en el lance. Conviene mojar la bobina de nuestro carrete antes de ponernos a lanzar, al igual que el anillado de la caña puesto que estos detalles reducen la fricción y mejoran la salida de la línea en el lance. Hoy en día en el mercado disponemos de líneas específicas para este menester, algunas incluso son flotantes facilitando la ardua tarea de recogida de nuestro rocket.
EQUIPO:
Para emplear esta técnica es imprescindible el uso de cañas específicas para ello. Hay cañas de “Spod” de distintas potencias (5lb, 5,5lb) y distintos anillados  que cumplen su labor a la perfección. Una costumbre que he observado en ocasiones y no recomiendo es usar las cañas de pescar para lanzar el cohete, ya que nuestro rocket lleno de cebo es mucho peso para la acción de nuestras cañas y podemos ver como se parten sin gran esfuerzo. Hay varios modelos de rocket “mini” que son los únicos que se pueden lanzar con la caña de pescar, ya que su capacidad y peso son muy limitados. El carrete es recomendable que sea ligero,  tenga una bobina grande con clip y gran capacidad de recogida. Es realmente duro recoger el cohete cuando llevamos media hora lanzándolo y nuestro carrete recoge poco más de medio metro por vuelta…
PRECISIÓN:
Otro aspecto que considero importante es la precisión. Hacer el cebado justo en un punto concentrado donde vamos a pescar es algo muy importante para perder el menor número de picadas. Aquí entra en juego la boya marcadora o “marker”. Este elemento tiene varias funciones: con la ayuda de un plomo iremos detectando el tipo de fondo (cieno, algas, grava, arena) y por otro lado, con la ayuda del “marker” podemos contabilizar los metros de profundidad. Este elemento es muy útil para hacer un “mapa” del terreno. Recomiendo perder el tiempo que sea necesario en conocer el puesto donde se pretende pescar antes de lanzar las cañas a “ciegas”.  Una vez  estudiado el escenario (tipos de fondo, obstáculos, profundidades, distancias)  podemos adaptar nuestra técnica a la situación que se nos presente y lograremos mejores resultados. Por otro lado, con el “marker” tendremos siempre visible y localizado el punto exacto donde deberemos lanzar el cohete y posteriormente las cañas.

Un elemento que ayuda bastante para lograr gran precisión en los lances es la utilización de los clips de las bobinas de nuestros carretes para frenar el lance. Lograremos un posicionamiento mucho más delicado y exacto tanto del cohete (durante el cebado)  como de los montajes (durante la jornada). Sobre todo en fondos de detritos o con densas algas con el uso del clip evitamos que el montaje penetre con fuerza en su interior y conseguimos una presentación sobre el fondo más facil de visualizar para el pez. Por otro lado, al frenar el lance  con el clip conseguimos que el montaje se estire y quede separado del plomo y bien presentado evitando enredos.
Sólo me queda recomendaros que tengáis paciencia, un buen uso de esta técnica puede ser muy satisfactorio en cuanto a resultados, pero lleva tiempo controlarla a la perfección y sobre todo con precisión. Un buen comienzo es practicar la técnica donde podamos llegar con las cañas, de poco servirá cebar en 100 metros si luego pescamos en 80 metros o viceversa… Espero haberos ayudado un poco en el análisis de los elementos imprescindibles de este método, el cual considero fundamental para el cebado a larga distancia.

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