En plena época estival, estamos a
más de 35º de temperaturas diurnas, los peces por el día no muestran gran
actividad, probablemente debido a las fuertes temperaturas que estamos
soportando haya menos oxígeno disuelto en el medio y esto les mantiene
aletargados, situándolos en zonas más cómodas, más frescas y de más
profundidad. Con estas condiciones, lo más evidente sería tentarlas en la
nocturnidad. Con el frescor de la noche los peces se suelen activar más
(especialmente en verano) muestran más coletazos, saltos y es el momento en el
que más cómodos y seguros se alimentan, especialmente cerca de la orilla.
Muchos carpistas, acostumbrados a los grandes embalses
donde en ocasiones necesitamos alcanzar grandes distancias, desestiman las
zonas someras sistemáticamente. En ciertos escenarios, especialmente en ríos y
zonas estrechas de los embalses una buena táctica es “pescar en los pies”. Muchos pescadores son reacios a probar suerte
en estas zonas de poco más de un metro de profundidad porque consideran que
“ahí no van a picar…” sin ni siquiera intentarlo!!
Especialmente en el verano es una
buena estrategia, ya que los peces se desplazan de las grandes profundidades
donde se resguardan por el día a las orillas donde encuentran el alimento que
los mismos pescadores han tirado al agua por el día, a cazar cangrejos en las
piedras o simplemente merodean por estas zonas ya que los peces pasto están en
ellas, la carpa también puede comportarse como un auténtico depredador…
CEBADO:
Para afrontar la sesión de una
noche, utilizaré en mi cebado boilies y pellets. Los pellets son cebos efectivos
durante todo el año pero en verano se muestran altamente efectivos,
especialmente los de un alto contenido
en aceite ya que el agua en esta época del año está más caliente, y los aceites
se dispersan mucho mejor. Para la ocasión, utilicé una mezcla de “Marine Amino Pellets” en 6mm, que son
pellets que disgregan aminoácidos de pescado muy digeribles y con un contenido
moderado en aceite (14%) y los “Betaine Ultramix” de mayor contenido en aceite
(22%) y con GLM (mejillón de labio verde), en distintos tamaños (4,6,8 y 11mm)
con diferentes tiempos de disolución. En
cuanto a los boilies utilicé 1kg de Live System 15mm y 1kg de Odissey XXX en
18mm. Todo el cebado lo repartí en los lugares elegidos con la ayuda de un
tirador a poco más de 6 metros de la orilla.
MONTAJES:
Utilicé un sistema de plomo tipo grippa de 4OZ
con leadclip para liberar el plomo en caso de enganche. De bajo utilicé los
“Hinged rig”, estos montajes se muestran altamente efectivos en zonas de fango
o detritos gracias a su mecánica, su longitud y su libre rotación 360º. Este
montaje funciona realmente bien en los cebaderos basados en boilies, eran justo las condiciones que se nos presentaban!!
De cebo utilicé los Live System
Cork Ball en 15mm, se trata de un cebo con la misma base que los Live System
shelf life que tiene en su interior una bola de corcho, este cebo atado con
seda dental, garantiza un gran poder de flotabilidad durante días!! Para
potenciarlos, tal y como recomienda la marca inglesa CCMoore, les añadí unos
10ml del “Live System Concentrated Bait Dip” unos días antes para que lo fueran
absorbiendo. El resultado final es un boilie de olor cremoso, gran flotabilidad
y una textura irresistible!!
Recordad
que en el verano, en el río y pescando a los pies, disfrutaréis de MOORE
picadas.
Enjoy your Fishing!!
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